A Jean Carlos y Andrés los une no solo una sólida amistad que se fraguó en las aulas, durante la secundaria, sino también el sueño compartido de emprender y formar una empresa que en aquellos años era una ilusión. No obstante, decidieron soñar despiertos. Sus habilidades para la ingeniería, robótica, cálculos y proyecciones, fueron dando forma a una idea que fue convirtiéndose en una realidad, cuando comenzó a nacer con el proyecto de grado de Jean Carlos para la universidad. Ninguno sospechaba que aquella asignación sería la génesis de una oportunidad para emprender.
“Fue un préstamo con una tasa de interés muy baja en relación al mercado, lo que nos permitió no ahogarnos en el pago de intereses” Andrés
Buscando los materiales necesarios, para cumplir con la asignación, se dieron cuenta de que no había mucha disponibilidad en el país y los pocos que sí tenían eran muy costosos. Es en este momento que Jean Carlos dice que era el negocio que desde muy jóvenes habían idealizado: traer filamentos para impresora 3D. Como todo comienzo, nada es fácil. Hubo que romper la alcancía y juntar a duras penas un monto mínimo para traer el primer pedido. Aportaron, por partes iguales, a la primera importación y con esto iniciaron.
Recuerdan que era una primera apuesta, y por ende trajeron materiales genéricos, de China, para tantear el mercado. El negocio comenzó tímidamente, pero arrancó. El flujo de caja no era el que hubieran querido, por lo que en muchas ocasiones se encontraban con la disyuntiva de traer máquinas o materiales, pero el bolsillo no daba para ambas. Era hora de seguir al siguiente nivel.
A través de las redes sociales, Andrés se enteró de que el Ministerio de la Juventud está realizando ferias de emprendimiento para acompañar económica y formativamente a aquellos jóvenes que, como ellos, tenían una idea y no la podían desarrollar. Junto al Consejo Nacional de Promoción y Apoyo a la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (PROMIPYME), llevan a cabo, con éxito, estas acciones por todo el país.
Aplicaron para un préstamo y al poco tiempo los llamaron. Luego de algunos trámites, consiguieron el dinero que les posibilitó poner su primera orden de equipos de última generación para darle un giro al mercado de las impresoras 3D. “Nosotros tomamos un taller, por lo que este programa no solo es la parte económica, sino que también incluye orientación para nosotros, los emprendedores. En este taller nos enseñaron las diferentes etapas de un negocio, como finanzas, mercadeo, administración, gestión con los colaboradores. Fue de mucho provecho para el éxito que hemos tenido”, asegura Jean Carlos Gómez quien es ingeniero mecatrónico y técnico en mecánica industrial.
“Fue un préstamo con una tasa de interés muy baja en relación al mercado, lo que nos permitió no ahogarnos en el pago de intereses que era lo estimado si hubiésemos acudido a la banca formal. Nos fue muy bien con este pedido y a los pocos meses ya teníamos liquidez para pagar lo prestado. Actualmente, somos la primera y la única tienda física en el mercado que se dedica a esto de la impresora 3D. Pienso que ha sido nuestro éxito y les doy un consejo a los jóvenes que quieren incursionar en este negocio: siempre hay que pensar en el elemento diferenciador, buscar lo que no hay para poder destacar”, afirma Andrés Cedano, quien tiene un grado técnico en Mecánica Industrial y esta a punto de convertirse en ingeniero industrial.
“Nosotros tomamos un taller, por lo que este programa no solo es la parte económica, sino que también incluye orientación para nosotros, los emprendedores” Jean Carlos
Tal ha sido el éxito de estos jóvenes emprendedores que a los pocos meses decidieron ampliar su rango de acción y deciden abrir una segunda sucursal, esta vez en el Distrito Nacional; la primera está ubicada en Santo Domingo Este. Con esta nueva apuesta quieren seguir consolidando un emprendimiento que les tiene bastante ocupados, pero con el corazón alegre de ver prosperar aquello por lo cual lucharon y que por lo que hoy siguen esforzándose.
La enseñanza como arte
Otro ejemplo del éxito de estos laboratorios de emprendimiento lo constituye Graciela Tolentino. Oriunda de Santiago de los Caballeros, esta joven emprendedora es una educadora nata. Desde siempre mostró inclinación por la pedagogía. Tiene como misión mejorar la vida de los demás, de hecho, dice que la enseñanza es un arte que ayuda a las personas a ser mejor. Con este juego de palabras siempre soñó con abrir un espacio donde el que se acerque alcance la excelencia en todos los sentidos.
Sin mucho presupuesto inició con un aula y le puso el nombre de MejorArte. Comenzó con la enseñanza del idioma inglés, tanto de forma personal como grupal, a niños y adultos.
La Feria de Emprendimiento llegó a Santiago de los Caballeros y, sin tiempo que perder, Graciela encaminó sus pasos hasta allí para ver de qué manera podía acceder a un préstamo que la ayudara a crecer.
“Acceder a un préstamo para alguien joven como yo, en ese momento tenía 24 años, no es fácil, pues no hay historial crediticio y todo lo que implica una acción como esta. Gracias al Ministerio de la Juventud y Promipyme, pude lograrlo. Vinieron, hicieron un levantamiento, evaluaron el negocio y gracias a ese préstamo pude mudarme a donde estoy, un lugar mucho más amplio. Tengo 4 aulas, profesores en diferentes tandas y, por supuesto, una matrícula más amplia de estudiantes”, dice agradecida.
Graciela reconoce que emprender no es fácil; sin embargo, dice que mucho más difícil es quedarse estancado viendo los días pasar. “Cuando tienes un sueño y algo que quieres lograr con los talentos que Dios te dio, que te has esforzado, hay herramientas, hay instituciones y organizaciones que existen para ayudarnos a lograr eso. En algún lugar van a encontrar un aliado que les de la mano , tanto en el sector privado como en el público”, asegura convencida.
“Vinieron, hicieron un levantamiento, evaluaron el negocio y gracias a ese préstamo pude mudarme a donde estoy, un lugar mucho más amplio” Graciela
Exhorta a los jóvenes que piensan que no hay futuro, o que todo está en su contra, a que también es necesario accionar, buscar, pues pudo haber visto en las redes el anuncio de la feria y dejarlo pasar. Reitera que está en cada uno buscar y aprovechar las oportunidades.
Graciela continúa soñando, pues quiere que MejorArte siga creciendo; sueña con que pueda expandirse a otras provincias, que las personas tengan la oportunidad de aprender de acuerdo a su estilo de enseñanza..
Valora enérgicamente la oportunidad que gracias a la gestión de estas dos instituciones del estado se le ha ofrecido, pues ha sido vital en el logro de lo que hasta ahora puede exhibir. Gracias a esta acción, ahora también ofrece clases de francés y español para extranjeros. Y, como si fuera poco, su academia también ofrece los servicios de clases de oratoria y superación del miedo escénico. En carpeta, tiene el proyecto de consultas de salud mental, ya que Graciela también es licenciada en Psicología Clínica.
Política de formación e inserción productiva
Este tipo de ejecutorias obedecen a una política de formación e inserción productiva que el Ministerio de la Juventud hace realidad a través de este programa, junto a políticas de Primer Empleo Joven. Para esto, se coordina con otras instituciones del estado para fomentar e incentivar el emprendimiento y la inserción laboral juvenil.
Esta iniciativa busca reducir la dispersión en los esfuerzos, creando sinergias para generar un ecosistema integral que facilite el desarrollo y expansión de los proyectos de emprendimiento liderados por jóvenes en toda la geografía nacional.
Jóvenes como Andrés, Jean Carlos y Graciela están diseminados en todas las provincias del país y gracias a acciones como estas, ya están emprendiendo con el respaldo y apoyo de un gobierno solidario que cree en las nuevas ideas y en la fuerza arrolladora de nuestra juventud.`