Joana creció viendo en casa la cultura de la mamajuana, en Najayo. A pesar de ser profesional del Derecho, su amor por el arte de las mezclas la llevó a reinventar con un toque gourmet la tradicional bebida.
Se sumergió en los más exóticos olores y sabores y esta vez mezcló culturas: Brasil, España, Holanda y claro la misma República Dominicana.
Para Joana no todo está hecho, siempre se puede reinventar, siempre se pueden cambiar las cosas. Muestra de esto es que el sr. Homero, nuestro director general, pasó de no gustarle la mamajuana a degustar, elogiar y quedar asombrado ante el producto de Joana.
