Raquel Sano hace un guiño a su apellido con la profesión que eligió: enfermería. Tiene seis meses entregando salud, amor, consuelo y empatía a los cientos de personas que a diario visitan el nuevo y moderno hospital municipal de Villa Hermosa, en La Romana. ¡Quien mejor que ella para comentarnos sobre la alegría y tranquilidad que tienen los comunitarios con la entrega de este centro de salud, que llevaban décadas reclamando!
“Este es un hospital estandarizado como se hace en el sector privado. A nivel profesional, en lo que a mí respecta, ha superado mis expectativas” Raquel
Es nacida y criada en esta comunidad. Para ella es un orgullo atender a sus propios vecinos, llevar tranquilidad a los familiares y a las personas enfermas que buscan su recuperación ya sea en una consulta o en una intervención complicada. Para eso se preparó y luego de adquirir experiencia en otros centros privados extrapola el rigor y el orden que debe imperar en la salud para que los pacientes de este hospital reciban la misma calidad. Los usuarios se hacen eco del trato y de las buenas atenciones que reciben, esas que juntos a los medicamentos, son los verdaderos calmantes del dolor. Tanto es así que muchos catalogan a los médicos y enfermeras de este centro como verdaderos “ángeles humanos” que han venido a llevar salud a esta laboriosa comunidad.
“Estamos aquí desde el día uno y ya mucho antes nos capacitaron para poder ofrecer el mejor servicio posible” Raquel
Con 16 años siendo enfermera, en el hospital está desde el inicio. Cataloga este centro como una respuesta de las autoridades a la petición que venían haciendo desde hace décadas. “Estamos aquí desde el día uno y ya mucho antes nos capacitaron para poder ofrecer el mejor servicio posible, nos capacitaron para el manejo de los equipos médicos que son muy modernos. Está funcionando a toda capacidad, 24 horas al día, siete días a la semana. Este es un hospital estandarizado como se hace en el sector privado. A nivel profesional, en lo que a mí respecta, ha superado mis expectativas, y poniéndome en los zapatos del paciente, porque las atenciones son de primera”, asegura.
“Este hospital me queda mucho más cerca de donde vivo. Está muy bien acondicionado” Lucila
Así lo corrobora Lucila de León, a quien encontramos en consulta de ortopedia por un fuerte dolor en su pie izquierdo, tanto en la rodilla como en el tobillo. Visitó otros centros de salud, pero en uno de ellos un doctor le dijo que la referiría al nuevo hospital de Villa Hermosa para que encontrara solución a su situación de salud. Así lo hizo y tras la consulta la encontramos haciendo varios análisis y estudios, como un Doppler en la pierna afectada, que se puede hacer en el mismo centro sin tener que desplazarse a otros lugares, como ocurría antes.
“Este hospital me queda mucho más cerca de donde vivo. Está muy bien acondicionado. Teníamos que trasladarnos lejos de aquí o pagar clínicas privadas, no todos podemos ir a las clínicas. Mi experiencia es buena, me sorprendí porque todos los estudios que el médico me mandó a hacer los pude hacer aquí. Antes, me tenía que trasladar a la capital o lejos de aquí, y gastaba mucho en transporte, ya aquí tenemos todo lo que necesitamos sin pagar nada”, comenta.
“Investigué y los hilos que se necesitaban para la operación rondaban los 20 mil pesos cada uno y se requerían cuatro. ¡Imagínense! Si este hospital no existiera” Juan
Juan Bautista Leonardo también puede hablar de lo beneficioso que ha sido este centro para este sector de La Romana. Acompañaba a su hijo, Luis Miguel, a curarse de una operación que había tenido una semana atrás. Tuvo una herida profunda que le lastimó los tendones de su brazo izquierdo. Desde que lo conocimos nos habló de su “niño”. Pensamos que se trataba literalmente de un niño pequeño, pero en cuanto preguntamos su edad, nos respondió que tenía 30 años, “es que para los padres los hijos siempre son niños”, nos respondió de inmediato.
“Estos tendones había que reconstruirlos y no contaba con los recursos para eso. Investigué y los hilos que se necesitaban para la operación rondaban los 20 mil pesos cada uno y se requerían cuatro. ¡Imagínense! Si este hospital no existiera, tendríamos que pasar mucho trabajo buscando un centro capacitado para eso que él necesitaba. Aquí no pagamos nada, solo decir gracias”, comenta el padre agradecido.
“Estar en terapia psicológica me ha cambiado la vida, me casé y me llevo mucho mejor con mi esposa. Lo mejor de todo es que es gratis, no hay que pagar nada” Carlos
Carlos Peguero es otro paciente que anda muy contento. Todos lo conocen como Mellito. Ha notado un cambio significativo en su vida desde que está asistiendo a terapia psicológica en el centro. Vino por temas de ansiedad generalizada y depresión. Lo más importante es que ha notado como ha cambiado en muchos aspectos en su vida, porque él mismo decidió cambiar. De la “vida desenfrenada” que llevaba antes, hoy dice que se siente más tranquilo, en control de sus emociones.
Desde que asiste a terapia y hace los ejercicios que la psicóloga le asigna, tiene una nueva ilusión de vida. Como presentaba este cuadro, pensaba que tenía que ver con su salud física. Es por esto que acudió al centro y se dirigió a medicina general, allí, luego de varias pruebas, los doctores a cargo se dieron cuenta de que lo que realmente necesitaba tenía que ver más con su salud emocional y por esto lo remitieron a consulta psicológica.
“Los habitantes de esta comunidad teníamos que trasladarnos bien lejos para buscar servicios de salud, ahora tenemos este centro a un paso. Que este hospital tenga servicios de psicología es lo mejor que han hecho. Hay personas que creen que la psicología es para locos. Los psicólogos son profesionales de la salud igual que los otros. Estar en terapia psicológica me ha cambiado la vida, me casé y me llevo mucho mejor con mi esposa. Lo mejor de todo es que es gratis, no hay que pagar nada”, comenta con una sonrisa.
“Que este hospital tenga servicios de psicología es lo mejor que han hecho” Carlos
Es tanta su satisfacción con el servicio que nos cuenta que ha recomendado el centro y les ha hablado a sus amigos de los servicios que ofrecen aquí. De hecho, las citas las pudo conseguir muy rápido, de manera semanal. Por último, nos reveló que su tarea de la semana consiste en hacer un escrito sobre cómo se ve a futuro, con su esposa e hijos, un ejercicio que sin duda alguna invita a la esperanza y a la proyección de tiempos mejores.
Más de 135 mil personas beneficiadas
Una figura principal en esta historia la constituye la señora Sara Jiménez, presidenta de la Junta de Vecinos de Villa Hermosa. Durante muchos años luchó para que este centro de salud sea una realidad en su comunidad. Conversar con ella nos llena de su energía positiva. No desmayó en sus esfuerzos, aunque no siempre sus reclamos fueron escuchados. “La situación aquí en Villa Hermosa era crítica, porque teníamos que trasladarnos a otros municipios en busca de salud, en ese trayecto hubo muchas muertes porque cuando eran emergencias, no llegaban a los centros de salud. Esta comunidad tiene una población de unos 135 mil habitantes que necesitaban verdaderamente este centro”, dice.
“La situación aquí en Villa Hermosa era crítica, porque teníamos que trasladarnos a otros municipios en busca de salud, en ese trayecto hubo muchas muertes porque cuando eran emergencias, no llegaban a los centros de salud” Sara
Relata las peripecias que tuvo que enfrentar para reclamar el hospital, estas incluían pancartas, vigilias, comunicaciones a funcionarios, entre otros afanes. Reconoce que cuando supo que la presente gestión iba a terminar el hospital no albergó muchas esperanzas, pues decía que lo creería cuando lo viera. Cuando vio el hospital inaugurado y funcionando, dice entre risas que ahí fue que dejó salir su alegría.
El director del hospital, doctor Rodrigo Adames, se muestra complacido con el trabajo realizado en estos meses posteriores a la inauguración del centro sanitario. Nos cuenta que en la actualidad está funcionando a toda capacidad, atendiendo alrededor de 450 personas diarias entre consultas, emergencias y exámenes de imágenes y laboratorio clínico. Reconoce también que era una necesidad perentoria para esta comunidad y que, con la llegada de la presente gestión, el hospital apenas contaba con un 10 % de ejecución, por lo que reconoce el interés y la ardua labor de las autoridades para, en menos de tres años, entregar a la comunidad un centro que cataloga como de segundo nivel, ya que maneja situaciones de mayor complejidad.
Hace dos meses comenzaron a dar servicio en el bloque quirúrgico. Relata que el servicio que ofrecen ha sido aceptado con alegría por los usuarios ya que se manejan con altos estándares y que es deber hacer que estos niveles de calidad y calidez se mantengan en el tiempo.
“Tenemos alrededor de 45 enfermeras y 76 médicos de varias especialidades. Tenemos una cartera de servicios que incluye medicina general, medicina interna, pediatría, ginecología, urología, nefrología, gastroenterología, cirugía vascular, nutrición, psicología y odontología” apunta orgulloso el doctor Adames.